10 planes para disfrutar del Empordà
El Empordà es mucho más que la Costa Brava. Hoy queremos compartir varios planes para disfrutar del Empordà desde otro punto de vista. Adentrándonos en pueblos con mucha historia, descubriendo su patrimonio natural y cultural, degustando su gastronomía y disfrutando de alojamientos con encanto, que descubrimos gracias a Terramar y a Costa Brava Experience.
Lo mejor es que los planes que os recomendaremos son ideales para cualquier época del año y os darán la oportunidad de conocer otra cara de una de las zonas más atractivas de Cataluña. Si es tu primera vez en esta zona, quizás también te interese pasarte por este post con los Imprescindibles de la Costa Brava, así podrás exprimir al máximo tu visita.
Aquí van 10 planes diferentes para explorar el Empordà y enamorarse aún más de esta tierra llena de rincones con encanto.
1. Puig Rom, un atardecer con historia en Roses
Roses, es uno de los destinos más conocidos de la Costa Brava, una ciudad por la que pasaron griegos y romanos y la puerta de entrada al Cap de Creus. Es conocida por su enorme bahía y es cierto que durante el verano es un lugar muy turístico, pero hay un lugar mágico e ideal para ver el atardecer con unas vistas de infarto. Este lugar es el Puig Rom, también conocido como Castrum, ya que es una antigua ciudadela visigótica.
Allí, además de admirar la Bahía de Roses desde las alturas podréis disfrutar una visita teatralizada para toda la familia, donde aprenderéis sobre los orígenes de esta ciudadela y pasaréis un rato muy divertido.
2. Cap de Creus
El Parque Nacional del Cap de Creus es un lugar mágico que durante años fue refugio de artistas como Dalí. El paisaje está salpicado de calas vírgenes, donde el viento y el mar han formado unos acantilados de escándalo y unos paisajes que parecen sacados de otro planeta.
Conducir con ese paisaje de fondo hará que quieras parar el coche en cada mirador. El mar y los acantilados te atraparán. En el Cap de Creus encontraréis algunas de las calas más bonitas de la Costa Brava, rodeadas de rocas y pinos. Como por ejemplo: Cala Rustella, Cala Jugadora, Cala Murtra...
Tampoco nos podemos olvidar de pueblos como Cadaqués, Port Lligat, Port de la Selva... o lugares con historia como el Monasterio de Sant Pere de Rodes.
3. Disfruta de unos de los cielos más oscuros de Europa y del río Muga en Albanyà
Hasta este verano no sabía que existía este lugar ni la relevancia que tiene en el mundo de la astronomía. Albanyà cuenta con la denominación de cielo "Starlight". Es uno de los mejores cielos oscuros de Europa para observar las estrellas y allí se encuentra el Observatorio Astronómico de Albanyà, donde puedes hacer tu primer bautizo astronómico, participar en talleres y sobre todo disfrutar del cielo al anochecer. Es una actividad ideal para hacer en familia. Los dos astrónomos que dirigen la actividad hacen que sea muy amena y que guste tanto a niños como adultos.
(Imagen del Observatorio Astronómico de Albanya)
El observatorio se encuentra junto al camping Bassegoda Park y junto al río Muga, del que os hablaremos más adelante. Así que combinar la visita al observatorio con la estancia en el camping es todo un planazo. El cámping se encuentra rodeado de naturaleza y colabora en la divulgación de la astronomía. Además es un alojamiento ideal para ir en familia. Organizan muchas actividades para los más pequeños y cuentan con muchos espacios de juego y ocio.
Nosotros nos alojamos en un bungalow muy amplio y confortable, con dos habitaciones, sala de estar, baño, cocina y un pequeño porche exterior. En él podían dormir hasta 5 personas y disponía de las mismas comodidades que un apartamento. El cámping también dispone de parcelas, bungalows de hasta 7 personas, bungalows de lona, zona de acampada...
Muy cerca del Bassegoda Park, se encuentran les "Gorges" del río Muga. Se trata de unas piscinas naturales que el río Muga ha creado a su paso por la población de Albanyà. Ideales en verano para refrescarse y para disfrutar de la naturaleza en cualquier época del año. Desde el pueblo sale un pequeño sendero paralelo al río.
4. Peralada, mucho más que su castillo
Peralada es conocido por su famoso casino y por el Festival Internacional de Música Castell de Peralada. Pero este pequeño municipio de origen medieval, tiene mucho más que ofrecer y merece la pena perderse por sus calles.
- Visita Guiada:
Hace unos meses tuve la oportunidad de hacer una visita guiada por Peralada, donde pude conocer la historia del pueblo, anécdotas y que me permitió conocer rincones y detalles que sola no hubiera sido capaz de ver. Me encanta hacer este tipo de actividades cuando viajo, porque enriquecen aún más la visita de cualquier pueblo. Además tuve el privilegio de visitar completamente sola un lugar tan increible como el Claustre de Sant Domènec. Si visitáis Peralada no os podéis perder este pedacito de historia.
- Castillo de Peralada:
El Castillo de Peralada es otro de los atractivos del municipio. Es un castillo del siglo XIV que a lo largo del tiempo ha sufrido varias reformas. La parte más antigua que se conserva son las dos torres de entrada, imagen emblemática de la ciudad. El recinto en la actualidad acoge unos jardines, el Casino de Peralada y el Convento del Carmen.
- Actividades en el río para toda la familia:
Los Secretos del río es un taller participativo pensado para los más pequeños de la casa, con el objetivo de descubrir los animales que viven en el río Muga y conocer el estado del agua. Es una actividad muy dinámica e ideal para los meses de verano, ya que refrescaréis los pies en el río.
Para descubrir la oferta de actividades que se realizan en Peralada a lo largo del año os recomiendo entrar en @ajperalada o en la web de Costa Brava Experience o Terramar.
5. Desayuno o Pícnic entre viñedos en La Vinyeta
No te puedes ir de estas tierras sin probar sus famosos vinos DO Empordà, y si además lo puedes hacer en un celler como La Vinyeta, el éxito está asegurado. El celler La Vinyeta se encuentra en Mollet de Peralada, un pequeño pueblo de interior rodeado de viñas y campos de olivos. Allí ha nacido esta pequeña bodega con mucho carácter y con un gran reconocimiento a sus espaldas, por la calidad de sus vinos y por promover actividades de etnoturismo muy variadas. Estas actividades están dirigidas por Josep y Marta, los dueños del celler, lo que las convierte en una experiencia familiar y cercana.
Entre las actividades encontraréis visitas guiadas, catas de vinos, pícnics, desayunos entre viñedos... Y si ya os animáis es posible hasta quedarse a dormir en su alojamiento rural con vistas a las viñas.
Nosotros pudimos disfrutar de un atardecer entre viñedos con la compañía de Serafí, un pagés de los de toda la vida y Josep. Ambos nos explicaron las curiosidades de las viñas y de la bodega mientras el sol iba cayendo. La atmosfera que crearon fue mágica y como remate final acabamos con una cata de sus vinos más emblemáticos y una degustación de embutidos de proximidad. Fue un planazo que nos encantaría repetir.
6. Vivir el románico en Vilanova de la Muga
Vilanova de la Muga, es una aldea del municipio de Peralada que guarda un tesoro de arte Románico en el interior de la Iglesia de Santa Eulàlia. Una iglesia del s. XI que exteriormente no tiene ningún atractivo, pero en su interior en la nave central conserva unas pinturas murales románicas, que recuerdan a las que podemos encontrar en las iglesias románicas de la Vall de Boí.
Con Terramar Visites i Costa Brava Experience podéis hacer una visita guiada para conocer su interior.
7. Castelló d'Empúries
Pasear por Castelló d'Empúries es hacer un viaje a la época medieval, ya que en el pasado fue la capital del Condado de Empúries. Podréis disfrutar de sus calles estrechas, su muralla, su judería y la Basílica de Santa María. Es un pueblo pequeño y rodeado de unos paisajes naturales que transmiten mucha paz. Además se encuentra en un punto estratégico para conocer muchos lugares de interés de la zona.
En Castelló d'Empúries aún es posible ver una de las antiguas puertas de entradas a la ciudad, el Portal de la Gallarda. Y justo allí se encuentra un restaurante con el mismo nombre. Está situado sobre la antigua muralla y con un patio medieval con vistas al antiguo foso y los campos de cultivo de las afueras del pueblo. El restaurante ofrece comida mediterránea y de mercado, con productos de proximidad. El ambiente es súper agradable y la comida está muy buena. Además tienen un menú de mediodía por 18€ y una carta muy completa.
8. Empuriabrava
Empuriabrava también es conocida como la Venecia Catalana. Es la marina residencial más grande de Europa y cuenta con más de una veintena de canales navegables. Es curioso ver como los locales amarran el barco directamente en la puerta de casa. Aunque también puedes disfrutar de navegar por sus canales alquilando tu propia barca.
Muy cerca de Empuriabrava podréis disfrutar de la naturaleza en el Parque dels Aiguamolls de l'Empordà o bien pasar el día en remojo en algunas de sus playas. Si os gusta la historia a unos 25km encontraréis las ruinas de Empúries, el único yacimiento en España en el que conviven restos griegos y romanos.
Si sois de buen comer no os podéis ir de Empuriabrava sin hacer una parada en el Restaurante Capitán, con vistas directas a uno de sus canales y a pocos pasos de la playa. Un lugar ideal para comer un buen arroz o disfrutar del pescado y marisco de la zona. La comida estuvo espectacular y el trato de Cele aún mejor si cabe, así que os lo recomendamos mucho. Si vais no os perdáis las vieiras con salsa de setas y el arroz caldoso.
9. Kayak por el río Ter
Cuando pensamos en el Empordà automáticamente nuestra mente vuela a las calas y playas de la Costa Brava, que se han ganado su fama a pulso, pero el río Ter es otro de los grandes protagonistas. Disfrutar del río a vista de kayak es una experiencia muy top. La vegetación que lo rodea es abundante y de un verde intenso que nos hizo recordar paisajes lejanos. Te olvidas de donde te encuentras ya que lo único que te acompaña es el vuelo de algunas aves, el sonido del agua y la naturaleza.
Nosotros hicimos la actividad con Kayak del Ter, en un kayak doble desde Colomers a Vergés, un tramo de unos 7,5km. Esta zona del río es muy segura y no se forman rápidos, lo que hace que sea una actividad para grandes y pequeños. Además cuenta con pequeñas playas naturales donde poder atracar tu kayak y sentarte a descansar y a disfrutar del paisaje.
Los chicos/as de Kayak del Ter, antes de salir te equiparán con chalecos y te darán unos consejos teóricos y prácticos para que la actividad sea toda un éxito.
10. Alojamiento con encanto
Sin lugar a dudas para hacer que un destino sea redondo es muy importante escoger un alojamiento con encanto. Se trata de Mas Ramades, una masía catalana del siglo XVIII con mucha historia. Donde Laura Mestres, su dueña, además de conocer todos los secretos de la zona hará que te enamores de la casa y de su historia. La masía se encuentra a medio camino entre los lugares de los que os hemos hablado en este post y los pueblos más bonitos de la Costa Brava. Tiene una magia especial, que hará que no te quieras marchar. Te lo decimos nosotros, que solo pasamos una noche y nos morimos de ganas de volver.
La casa conserva parte de su estructura original y cuenta con siete habitaciones cuidadas al detalle. Cada habitación tiene su propia personalidad y cuenta con todo tipo de comodidades. La casa además dispone de una sala de estar con juegos de mesa y billar y una sala de lectura con chimenea. También podréis encontrar una cocina enorme y muy equipada para los huéspedes, que además cuenta con una mesa enorme para poder compartir cenas y charlas con otros viajeros. Si queréis un espacio independiente Mas Ramades dispone también de un pequeño apartamento exterior, ideal para familias.
El exterior de la casa es otro de los platos fuertes. La masía cuenta con una piscina rodeada de hamacas y zonas verdes, un patio exterior ideal para descansar o hacer algunas de las comidas del día y una barbacoa al servicio de los huéspedes. Además las noches de verano cuenta con una foodtruck en el patio, que te permite cenar bajo una guirnalda de luces. La escena es de lo más romántica.
Aunque nuestra visita fue rápida nos alojarnos en una habitación muy amplia y cómoda con baño privado. Desde nuestra ventana teníamos vistas a los verdes campos de Torroella de Montgrí. También pudimos disfrutar de un desayuno a la carta con productos de próximidad muy completo.
Los más pequeños podrán disfrutar de los animales de la granja y del huerto, así como del parque de juegos infantiles y de todos los espacio verdes que rodean la masía.
Laura además de hacerte sentir como en tu propia casa te recomendará los mejores lugares de la zona y os ayudará a reservar las actividades que queráis realizar. Es una enamorada del Empordà y conseguirá que salgáis de allí con ganas de volver pronto a su casa y a esta zona mágica de Girona.
Sin lugar a duda el Empordà es una de las zonas más bonitas de Cataluña, con una variedad infinita de paisajes y de actividades para todos los públicos. Si queréis consultar la oferta de actividades no dudéis en pasaros por Terramar y Costa Brava Experience. Os ayudarán a conocer el Empordà más auténtico, siempre teniendo presente el turismo sostenible y responsable, de la mano de expertos de la zona. Si aún no conocéis esta zona os invitamos a ir y descubrir todos los secretos que esconde.
Si te apetece ver vídeos y más fotos de la Costa Brava podrás encontrarlos en los stories destacados de mi Instagram: @tengo_alma_viajera.
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¡Gracias por acompañarme otro viaje más!
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